No todos los tipos de té «aceptan» de la misma manera el que añadan leche a su infusión ya que se ven afectadas características organolépticas como el color, su tonalidad pasa a ser totalmente diferente , su olor resulta enmascarado y por supuesto su sabor difiere mucho si contiene solo agua a si aportamos el sabor característico de la leche. También tendremos en cuenta las interacciones que se producen entre los principios activos que aporta la planta infusionada y la caseína proteína de la leche , se inhiben las catequinas ,afectando su acción antioxidante, que nos protegen del daño que producen los radicales libres en las células.
La infusión la haríamos como estamos acostumbrados, calentando el agua, añadiéndola a la temperatura adecuada sobre el té que a nosotros nos gusta, elegimos el que nos apetezca en ese momento, dejando reposar la infusión para luego añadir la leche poco a poco y dejar reposar dos o tres minutos para que se mezclen sabores y evitar la desnaturalización de las proteínas, aunque en algunos países se hace directamente la infusión con leche.
Como ya hemos dicho no todos los tés aceptan igual esta arriesgada combinación, los negros y los rojos son los que mejor resultado final dan.
Tés negros con leche
Primero veremos algunos tés negros en los que es muy conocido el buen resultado que dan, dos típicamente ingleses, el mundialmente citado como el té del desayuno «Té negro breakfast» (con más o menos cantidad de leche) y el «Earl Grey»( con bergamota) muy usado en la tradicional y hoy un poco olvidada «hora del té» porque para los ingleses de hoy en día cualquier hora es buena para tomar un té. Estos dos tés que acabamos de citar, tienen excelente sabor y aroma, infusionados solos en agua o con leche añadida. Hay un té también negro, el «té negro Pakistaní» que se puede preparar directamente en leche y su resultado es una deliciosa infusión muy especiada en la que predomina un delicioso sabor a canela.
Tés rojos con leche
Con los tés rojos también se pueden hacer combinaciones que son muy apreciadas citaremos algunas como, té rojo Pu Erh Cherry, té rojo Pu Erh canela, o el té rojo chocolate …., aunque varía más su sabor .
Podemos todos ellos, prepararlos en verano como una buenísima bebida refrescante. Para ello dejaremos enfriar la infusión que habremos preparado al modo convencional y una vez fría, añadiremos la cantidad de leche a nuestro gusto, si somos golosos podemos añadir leche condensada, podremos guardarla en el frigorífico y mantendrá su sabor y aroma uno o dos días.